Aburrimiento -Tsubasa

Rabia tenido por ojos cerrados por quizás cuantos minutos que al abrirlos y mirar a su lado al chico se hizo hacia atrás, pero luego recordó todo. Suspiro levemente y se puso de pie, cogió sus interiores y se acomodo a su ves el cabello limpiando su frente algo sudada. Camino hacia el mini bar y volvió a sacar una soda, la cual bebió con rapidez y luego se dirigió al baño, para volver y recortarse al lado del menor.

A los pocos minutos se quedo dormido y no despertó hasta pasada las diez de la mañana del otro día.

Al despertar miro hacia un lado no encontró al chico, pero no se preocupo mucho por ello, de echo hasta pensó que este se había ido para volver, en verdad eso no le afectaba demasiado, y es que a Light en cosas de amor no se le podía pedir demasiado, medio sonriente se levanto y camino hacia la sala sin mirar más que a la mini bar en donde saco una cajita de leche que comenzó a tomar con ganas y al abrir los ojos y mirar hacia a un lado observo a Tsubasa, dejo la cajita y la metió en la mini bar.- Buenos días -le dijo con una sonrisa- te has levantado muy temprano -comentó como si sus antiguos pensamientos se hubiesen borrado, mas no era así, solo estaba siendo cortés.

Le miro un tanto confiado, el chico no era alguien del cual había que preocuparse, pero no lo sabía muy bien Light siempre fue muy desconfiado, cerro levemente los ojos y luego los abrio para mirarle con una sonrisa, ahora muy sincera.- Creo que seria una buena idea, no más deja que me de una ducha -le dijo y partio hasta el dormitorio para luego entrar a la habitación de baño y darse una ducha corta pero reponedora. Después de unos minutos salio de la habitación vestido de manera casual, jeans, una playera cómoda y zapatillas, además de una chaqueta debajo del brazo.- Dónde quieres que te lleve? .pregunto un tanto coqueto tomando las llaves de la habitación.

Asistió levemente y camino hacia la puerta de salida y sonrio levemente.- Me gustaría más que te mantuvieras en tu forma humana -le dijo acomodandose el cabello, despeinandoselo de manera casual- Vamos? -pregunto abriendo la puerta y dejando salir a su servant para luego caminar hasta el ascensor y marcar en numero uno del hotel. En un par de segundo miro su reloj y se dió cuenta de la hora, era temprano.- Quieres desayunar primero?

Miro hacia donde indicaba el menor y asistio.- No me molesta descuida... yo tambien tengo hambre -le dijo mirandole de reojo y dedicandole una sonrisa complaciente, entonces al llegar a la puerta abrió esta y lo hizo pasar, los anfitriones le saludaron de manera formal y les indicaron una mesa vacia. Light tomó asiento con lentitud mientras miraba hacia todos lados, más bien por costumbre.- Qué te gustaría comer? -pregunto mirando la carta y no viendo más que platillos muy elaborados, algo no muy de desayuno... pero luego vio mejor y encontro lo que queria.

Sonrio levemente y penso que pedir lo mismo para ambos seria lo mejor, entonces ignorando la vista de las demás feminas oyó a su compañero y sonrio con diverción.- No se les dice hembras comunmente a las de raza humana... se les llama mujeres... -le dijo corrigiendole con diversion y le miro por unos segundos.- Y bueno... si... aunque tambien un par estan fijandose en ti... eres muy guapo -le dijo sonriendo levemente y poco después llego el mesero, Light pidió para ambos y le vio alejarse.- Te han gustado las chicas? Más bien, te gusta alguna de las que esta aqui?

Negó levemente.- Por nada -se acomodo en el asiento y miro por unos segundos al muchacho, era un tanto desesperante, bueno no lo sabía pero él era muy extraño. No sería acaso alguien enviado por una agencia para investigarlo?. No, no lo creía así, por lo demás pese a varias probas que había pasado aun no podía confiar en el por completo. Pero por el momento trato de relajarse y no preguntar nada extraño.- Tengo hambre... -murmuro lamentándose y cerrando los ojos con pereza.- No me gusta que me observen por mucho rato... -comento divertido y se apoyo en la mesa.

-No no te preocupes -le dijo de manera amable y vio como luego el mesero se acercaba dejando las cosas en la mesa y luego se retiraba.- Se ve muy bien... -comento oliendo el alimento y luego mirando a Tsubasa con una sonrisa, ante aquello no quiso decir nada y solo comenzó a comer, le miro de soslayo para que este lo imitara y comenzó a saborear mejor su comida. Estaba muy rica, los días anteriores nunca le había parecido tan apetitosa la comida del hotel, era extraño, pero no quiso darle mayor atención.

Había estado comiendo por segundos hasta que le escucho, aun pendiente de su plato, entonces alzo levemente su mirada para ver a Tsubasa. Increíblemente el menos tenía dones muy especiales, sonrió ladino y miro un poco hacia su alrededor.- Y... quienes son los servants... -pregunto para no ir directamente al plano de saber cual de todas esas personas eran heliogabalus. Aun no sabía muy bien que podría hacer con ellos en estudio, pero de que quería conocer mucho más, así era. Ante su curiosidad apenas tomo su servicio para comer.

Al escuchar la descripción de los chicos miro a cada uno de ellos fijándose más en sus acompañantes que se mostraban muy normales, claramente uno que otro era un tanto excéntrico, pero en realidad en todos lados se veía gente que vestía de manera muy peculiar. Suspiro levemente y volvió los ojos a los de Tsubasa, sonrió ladino y negó levemente.- Lo sé, y lamentablemente creo que para lo que más son usados es para eso -le dijo alzando una ceja y bebió un poco de su jugo.- Pero descuida que yo no te veo como eso... le dijo después para quitarle algún tipo de preocupación que podría existir en él.

No les gustaban las personas que decían algo con una sonrisa en la cara mientras decían algo un tanto desagradable, le miro con el ceño fruncido y es que el tampoco tenia demasiado derecho a reclamar por que no era una de las personas mas sinceras del mundo que digamos pero al menos decir las cosas con la actitud que debían decirse estaba bien.- Bien... -susurro mirando hacia otro lado cuando ya hubo terminado su comida y se fijo en los demás entonces luego le miro alzando una ceja.- No te obligo a estar conmigo... si crees que no soy lo suficiente bueno para ti puedes dejarme... lo que menos me gustaría hacer es estar con alguien que me teme... o no le gusto.

Mucho mejor, se había comportado de manera más sincera por lo que él mismo relajó su rostro y solo se dedico a mirar hacia otro lado.- Esta bien... -le dijo de manera suave y algo complaciente por la actitud mostrada del menor.- Yo tampoco ser un amo dictador ni malo, me gustaría que fueras un poco más independiente que investigues más cosas sobre los humanos pues no puedo explicarte cada cosa que pase a mi alrededor, por eso te dije que leyeras novelas... se te abrirá la mente ante situaciones de complejidad poco comunes y sabrás actuar de mejor forma ante situaciones difíciles -le dijo con temple neutro.- Eso es más para tú bien.