Es algo complicado [Priv-59]

Había tomado sus maletas y las había dejado en el portaequipaje del automóvil que después los condujo al hotel. Al llegar al lugar le pagó al taxista y sacó sus cosas, volviendo a dejar que Gokudera caminara adelante para guiarlo, sin embargo fue Yamamoto el que se acercó primero a la recepción y esperó a Gokudera para preguntar los detalles de las habitaciones.
-Queremos dos habitaciones... -le dijo el moreno a la mujer que los atendía coquetamente, buscó en el ordenador y ladeo la cabeza e hizo una mueca, miró al más alto de los hombres y luego al peliplata.
-En verdad lo siento, en estoy últimos días hemos tenido muchas reservaciones y los turistas han aumentado -suspiró viendo nerviosa a los dos.- Sólo hay una habitación, pero es para dos, tiene dos camas -les dijo para de algún modo esperanzar a los dos supuestos hombres hechos y derechos.- Gustan tomarla?
-Mmm si no hay otra sí -contestó Yamamoto sin darle más rodeos al asuntos, para que ir a otro hotel si ya estaban allí.
La señorita llamo al chico de las maletas el cual los guió al ascensor. El moreno había tomado las llaves y al parecer el que guiaba ahora era él. Ya dentro del ascensor se arregló las ropas y miró de soslayo a Gokudera que no parecía muy feliz por aquel gesto en el rostro, en verdad había pensado que después de tantos años el humor del peliplata había mejorado y en verdad con los demás se mostraba tranquilo pero apenas se acercaba el beisbolista ya todo cambiaba, >>el debería cambiar... << pensó mirándolo aun y luego desviando su vista a la puerta del elevador cuando se abrió.
Al salir de allí se dirigió a la puerta de la habitación y la abrió, espero a que el chico dejara las maletas dentro y luego cerró la puerta, se sacó la chaqueta y la dejó en el perchero.

en el camino ni siquiera le diriguio la mirada; se sentia patetico que algo como eso le sucediera; si habia estado enamorado de un Idiota en secreto pero ya no estaba tan seguro de que el otro lo "sospechara" o lo supira como sea no le miro nisiquiera cuando pago el vehiculo, cuando entraron en el lujoso lugar y mnoscuando la estupida recepsionista le descia tal cosa *como es posible que todo el mundo este contra mi*penso mirando verdaderamente molesto a aquella chica y como dar un no cuando este imbecil ya habia decidido -...Tsk... suspiro pesadamente soltandole bruscamente las maletas al botones y camio mirando hacia otro lado manteniendo las manos entre sus bolsillos del pantalon anteniendo una distancia con Yamamoto.



despues de desender del elevador seguia con el mismo gesto -muevete... dijo casi como un susurro mientras el mas alto abria la puerta que les habia correspondido; miro de reojo al otro chico como si esperara algo dejando delicadamente el equipaje en el suelo -te vas a quedar a mirarnos invecil? le dijo al botones un tanto burlon sacando algo de dinero y arrojandoselo al rostro -ahora largate mensiono dandole la esplda a aquel sujeto para luego dirijirse a Yamamoto sin siquiea mirarle -tomare un baño ni si te ocurra entrar desabotono su camisa mientras caminaba en direccion al baño y acomodandose de vez en vez el cabello peinandolo con sus dedos hacia. cuando estuvo en el baño solo cerro el baño sin siquiera poner el seguro se hacerc al espejo mirandose detenidamente y desvistiendose frente a este para luego meterse bajo la ducha abriendo totalmente la llave dejo que el agua callera encima suyo por completo ; pasando su manos por su cuerpo sintio aun un leve dolor entre sus gluteos -ah..mm maldicion se quejo al palpar aquella superficie sintiendo entre sus piernas como ssalian unas cuantas gotas del semen de Yamamoto

Se había quedado mirando a Gokudera y cómo el actuaba, frunció levemente el ceño cuando trato de esa manera al chico y le dirigió una mirada complaciente, pero luego volvió a mirar a Gokudera, pero prefirió no decir nada, no era un niño pequeño al cual podía corregir. Le miró a los ojos cuando se dirigió hacia el y aceptó aquello, también se daría una ducha, luego claro, no molestaría demasiado a Gokudera, además no tenía muchas ganas de estar cerca de alguien que trataba así a las personas. Por otro lado era Gokudera y sabía que era así y aun seguia detrás de él, le seguia amando a pesar de tantas escenas iguales que vio en el pasado, suspiró y se metió igual al baño, trató de no hacer mucho ruido, vio la ropa del chico en el suelo y le olló maldecir, no era un gran sorpresa en verdad y pasó su vista a la puerta, por que no la había dejado con seguro?, bueno, de todos modos no quería hacer nada y sólo esperaría a que el chico saliera para darse una ducha él, por mientras comenzó a desabrocar los botones de su camisa hasta sacársela por completo y luego comenzar a desabrochar su pantalón, antes, paso una mano por su abdomen, aun se sentía húmedo en aquel lugar, allí se había desparramado el semen de Gokudera, miró hacia la ducha y luego se apoyó en la fría pared sin quejarse. Era extraño que a pesar de ser Yamamoto un vampiro su piel siguiera siendo algo más tibia que las demás, eso era algo agradable y por lo mismo a las personas les costaba entender más su condición, la mayoría de las veces no le creían hasta que bueno, se arrepentían.

sentia que el agua le cai pesadamente sobre su cuerpo ..dspues de todo Yamamoto era el culpable aun su cuerpo dolia un poco; recargo sufrente el l helada pared de la ducha mientras el agua caia en su nuca -... idiota... murmuro saboreandun poco del agua que resbalaba en su boca *poque nopuedo decirle nada* penso *ademas que se cree? en primer lugar porque deidio que nos podiamos quedar en el mismo cuarto* estaba ta sumergido en sus pesamientos que no sinti absolutamente nada, quizas el ensordecedor sonido de la caida del agua o posblemente el Idiota del Baseball enralidad le haba respetado su privacidad



despues de unos minutos mas cerro la llave del agua suspiando levemente y relajando un poco su cuello entre abrio las puertillas que separava la ducha del baño saliendo desnudo como si nada ; se supone que estaba solo, asi que no habria ningun problema, asi que no habria ningunincombeniente al no tener una toalla cerca en esos instantes -....- parpadeo un par de veces -.....- era como si ni creyera que el otro estaba ahi parado como un pervertido; su rostro se puso completamente rojo mas de lo normal a presar de ser tan palido, abrio totalmente sus ojos frunciedo el ceño completamente "enojado?" -QUE MIERDA HACES AQUI!!! - le señalo totalmente escandalizado ademas de que justamente las toallas estaban atras de Yamamoto, fruncio el ceño y se le hacerco amenazante apretando sus puños mientras que de todo su cuerpo caian gotitas de agua; era molesto, era mas alto y esa forma deser que tanto le gustaba .. era en realidad molesto? -quitate de ahi idiota

Al ver que Gokudera estaba saliendo de la ducha le miró de soslayo, en verdad no tenía mucho que ver de su cuerpo, ya se había concentrado en él hace un par de horas por lo que terminó por quitarse la ropa, comenzando por los pantalones. Le miró alzando una ceja y abrió sus ojos al notar el sonrojo del chico.- Me voy a bañar -le dijo bajando ahora sus interiores para luego caminar hacía la puerta de la ducha.- No sé que te avergüenza tanto, lo acabamos de hacer, ya sé desde mucho antes como es tu cuerpo desnudo -le dijo depués y antes de entrar se acercó rápidamente a sus labios y le tomó de la cintura para darle un largo beso en los labios. Fue algo estúpido si, pero a decir verdad verle en otra situación desnudo le había gustado y nunca era malo contemplar el delgado y pálido cuerpo de Gokudera al frente suyo. Una vez le soltó caminó nuevamente hasta la ducha y se metió abriendo las llaves del agua y regulando la temperatura de ésta misma.

Dejó que el agua cayera sobre su cuerpo y luego se enjabonó, se aplicó shampoo en el cabello y una vez estuvo listo salió de la ducha, caminó hasta el mueble de las toallas y tomó una para comenzar a secarse, y otra después para pasarla por su cabello, pero no demoró demasiado y la dejó colgada. Tomó sus ropas y las sacó de allí, las dejó en un canasto de ropa sucia en un cuarto apartado y luego volvió a la habitación con una toalla en la cintura, buscó su maleta y la abrió encima de su cama y comenzó a elegir lo que se pondría para salir a beber algo de sangre.

Volvió al baño y se miró en el espejo, pero éste estaba empañado, por lo que tuvo que limpiarlo, una vez listo se vio mejor y sacó una de las maquinas de afeitar que estaba a disposición y comenzó a afeitarse, era bueno mostrarse atractivo a cualquiera de las presas que viera en el lugar y no le gustaba demasiado usar patilla o barba. Finalmente se secó bien y volvió al cuarto, caminó hasta la cama y tomó la ropa que había escogido. Se puso los boxers, unos pantalones de tela azul oscuro y una camisa de un tono más claro, luego se puso los calcetines y los zapatos negros, entonces tomó la toalla de Gokudera y luego la de él para llevarla hasta el baño y dejarlas allí, una vez volvió dejo la maleta a un lado y regresó al baño para secar un poco el piso mojado.

Cuando ya hubo terminado de hacer todo caminó hasta la orilla de la cama de Gokudera.- Voy a salir... tengo sed -le dijo sincero y se paso una mano por los labios al ver el cuello del Gokudera.- Quieres que te traiga a alguien o me vas a acompañas? -´preguntó no quitando de su vista el cuello del otro, pero no podía seguir así, terminaría acostumbrándose demasiado y tenía que dejar que el otro también recuperara fuerzas... -Vamos... -le insistió después y se acercó a la puerta.

Espero a que el otro se arreglara bien y se pusiera sus accesorios para salir del cuarto. Una vez en el elevador miró a Gokudera de reojo, era extraño ahora ir con este a todos lados, después de todo se había acostumbrado a estar solo, suspiró, pensando en que le estaba dando demasiadas vueltas al asuntos, ahora mismo pensaba en que después de tantos años no podía dudar en ese tipo de cosas, lo había buscado, seguido, ahora era imposible aburrirse de él. Al salir al vestíbulo vio a un par de personas sentadas en los sillones, se separo de Gokudera sin decía nada y caminó hasta el otro lado de la sala, ya había captado la mirada tímida de una mujer que aparentaba ser mayor, le sonrió coquetamente y se dio la vuelta caminando ahora hacia el pasillo menos iluminado, quedándose en la entrada, mirándola fijamente, esperando captar aun más su atención, entonces la mujer se puso de pie y caminó hacia la dirección del moreno. Éste se dio la vuelta y siguió caminando hasta doblar a la derecha, le esperó allí y observó bien el lugar, más allá estaba la salida de emergencia y sería mucho más fácil sacar el cuerpo inerte de la mujer, que, ahora mismo se presentaba frente a él.

-Cómo te llamas? -pregunto la mujer hipnotizada por los ojos del hombre.

-Eso no importa... -le dijo mirando hacia ambos lados y tomando a la mujer por el cuello para luego pegarla a la pared e ir rápidamente a su yugular, clavó sus dedos en ella, ésta aun con lujuria no se quejó demasiado y jadeo disfrutando de aquello, pero el vampiro siguió succionado su sangre y su corazón dejó de latir, una vez supo que estaba muerta, la tomó en brazos y con normalidad la llevó hasta la puerta de salida, la recostó a un lado de un par de cajas apiladas u entró, pasó su dedo pulgar por la comisura de sus labios y volvió a vestíbulo, caminando sin buscar al peliplata, llegó hasta el ascensor, ya había cenado, con un cuerpo le bastaba. Una vez en el cuarto de sacó la ropa, y quedó en boxers, movió un poco más su maleta y se recostó, Gokudera aun no llegaba.

Habían pasado un par de minutos y escuchó los pasos del chico acercándose a la habitación. Mantenía los ojos cerrados cuando el otro entro y le miró de reojo, se sentó en la cama y le vio deshacerse de sus camisas y dejarlas a un lado, dejó sus pies en el suelo y le miró por unos segundos apoyando los codos sobre sus muslos y recargando su cuerpo de esta manera.- Saliste del hotel? -le preguntó después de observar sus zapatos que estaban algo salpicados con agua sucia. En el hotel no era posible un tipo de mancha así, y los zapatos del italiano estaban pulcros cuando se separaron, se preguntó hacia donde había ido y con quien y si es que había pasado algo, pero no, deshizo inmediatamente aquellos pensamientos Hayato nunca dejaba que algo más pasara, pero siempre recordaba un par de escenas que le molestaba demasiado ver, no le gusta la cercanía que tenía con hombres o con mujeres... y aunque él muchas veces hiciera lo mismo no lo podía permitir dentro de su mente. No tenía mucho que preguntarle ya sabía la manera de actuar del chico y por lo general se alejaba de la multitud, era algo que había aprendido de él, había muchas cosas que había copiado del que lo convirtió en vampiro.

Se puso de pie y caminó hasta el otro, le olió desde allí y le miró después.- Has bebido... -susurró y pestañeo un par de veces y se acercó un poco más.- Vodka... y ese hombre, olía a muchos más tragos, era un borracho... esa sangre no es buena -le dijo alzando una ceja y luego pasó su dedo pulgar por la comisura de sus labios y se llevó el dedo a sus labios.- Mmm... no está tan mal, se convino con tu saliva -le dijo y se aceró mucho más apoyando sus manos en el colchón y se acercó a sus labios, comenzó a besarle suavemente y luego abrió los labios.- Mi victima fue una mujer... -le dijo después de separarse.- Sabia bien.

Soltó el besó aun con los ojos cerrados agachó la mirada y luego le miró al escucharle.- No tenía más de treinta y cinco años... no estaba mal y se veía muy linda -le dijo sincero y dejó que se cambiara de cama, le miró desde allí por unos segundos, re costó en la cama sin sentir frío alguno al solo llegar boxers, pero entonces se puso a pensar, en como seria la vida desde ahora con Gokudera, no sabía si es que las cosas siempre serían así o algún día Hayato doblegaría su orgullo y cedería de una vez para ser una pareja algo más normal de lo que eran, suspiró y le miró de reojo. Por lo demás cuando había sido la vez que lo había dejado tranquilo por tanto rato y ahora más cuando tenían mucha más cercanía.

Después de unos minutos le vio de reojo, sabía que no estaba dormido, lo sabía bien pero que importaba, se puso de pie y le hizo a un lado.- Se que estas despierto -le dijo, si era algo odioso, pero si no era así sus posibilidades de tener algo con el italiano serían imposibles.- Yo sé que ese hombre pretendía algo más contigo -le dijo abrazándole por la espalda, besó su nuca su luego su cuello.- Sé tus métodos, y nunca me ha gustado que te toquen demasiado -murmuró contra su oído. La cama no era muy amplia, pero no alcanzaba a ser muy angosta para ambos y cabían perfectamente en ellas. Pasó sus manos tibias por donde la victima de Gokudera había pasado sus manos y subió hasta su cuello para ladear su cabeza y así tomar sus labios con los propios y besarle, profundamente y con deseo, quería sacar el sabor de la sangre de su victima y quería que el sabor de a sangre de aquel hombre se fuera también. Le dio la vuelta y soltó sus labios le miró a los ojos.- Mucho mejor -susurró cuando aquel gusto se fue de sus bocas.

Siguió con el beso por unos segundos y apenas el otro se separa se pregunta el por qué de su expresión entonces lo abraza sorprendido cuando el otro lo hace y suspira al sentir sus lamidas, sonríe levemente acariciando su espalda con ternura, besa su cabeza, pero al separarse le ve a los ojos y nota algo extraño y mucho más extraño es cuando éste habla. Pestañea un poco.- No... no es así -le dice sentándose en la cama también.- Ahora quiero que estés conmigo solamente -piensa un par de segundos antes de soltarle todo lo que quería decirle- la verdad es que no sé como llegar a ti, no sé como acercarme a ti sin recibir alguna mala palabra o algún insulto, no sé, muchas veces no sé cuando dices las cosas en serio y cuando no y tengo que confiar en lo de nosotros -se le acercó un poco y le tomó de la mejilla, se acercó a él besando la otra mejilla y luego abrazándole.- Ahora quiero estar contigo sin hacer nada más que dormir... -le dijo y le soltó mirándole a los ojos.- Hayato, eres mucho más que un cuerpo para mi, yo te amo de verdad -le tomó de un brazo obligando al chico a apegarse a su cuerpo y abrazándole sin dejarlo ir, lo apegó a mucho más y respiró profundamente por unos segundos.- Créeme -besó su frente ahora y le miró a los ojos.- Duerme conmigo... ya ha sido mucha soledad en nuestras vidas -le dijo aun mirándole a los ojos y tomando sus mejillas para besarle de manera tierna en los labios y dejarlo de nuevo para observar su mirada, no le molestaba ser cursi si con esto le demostraba todo lo que sentía en verdad por él.

Si ese era el plan cuando se conocieron, no lo recordaba y para Yamamoto quizás en ese tiempo era la única posibilidad para estar un poco más con él, mas nunca hizo nada nunca fue su intensión y al parecer la de Gokudera tampoco, por lo demás le gustaba soñar con que al otro no le gustaban las chicas "Qué mierda piensas, nunca haría eso, las niñas son chillonas y odiosas, les gusta andar de la mano delante de las otras personas y demostrar afecto" eso era lo que siempre escuchaba de su parte, de algún modo soñaba con que algún día le diría que no le gustaban y punto y que nunca estaría con una, por lo mismo no fue hasta que le escucho decir su nombre mientras se masturbaba, si bien ya lo había visto antes nunca no había escuchado y se demoró desde allí un par de meses para reunir coraje y presentarse frente a él.- Era una escusa para estar cerca de ti... -comenzó a decir sin dejar de abrazarlo, se sentía cómodo y mucho más cuando el otro relajo su cuerpo, hasta parecía que se abrigaba más rápido al estar más tranquilo.- Desde siempre -le dijo con sinceridad.- Siempre estuve enamorado de ti... en verdad yo pensaba que después de un tiempo me comenzarían a gustar las chicas, tampoco me fije antes en otro hombre a mi sólo me gustaste tu, eras diferente a todos los que conocía en ese entonces... y ya luego después de ser un poco más amigos ya no pude decirte nada, entonces después pasó todo esto -suspiró y acarició su mejilla para volver a tenerlo entre sus brazos.- Siempre te ame pero nunca te lo dije por que sabía que me ibas a rechazar... -susurró después.- Es verdad, lo prometo Hayato.

Miró a sus ojos algo dudoso cuando el otro apoyó sus dedos en su nuca, sufrió un escalofrío por lo mismo, pero no se quejó ni se movió un poco entonces dejó sus ojos abiertos cuando el otro le besó y correspondió, respiró algo agitado por aquello y cerró los ojos, comenzaba a dejarse llevar por el otro, sus intenciones no iban tras aquello, más los movimientos de Gokudera comenzaban a encenderle y no se atrevía a rechazarlo, pues no quería hacerlo, después de todo aquello no era mala idea. Entreabrió los labios y le miró un poco, volvió a cerrar los ojos y ahora él comenzó un beso mucho más profundo que el del chico, entreabriendo un poco más sus labios y dejando pasar su lengua a través de los labios del peliplata, encontrándose luego con su lengua y masajeandola con placer y gusto, suspiró a la vez que lo hizo el otro, pasó sus manos un poco más fuertes por su piel y lo acercó a su cuerpo mucho más, disfrutando por lo movimientos del italiano, ladeó la cabeza hacia otro lado, retomando el beso.
Finalmente empujó un poco el cuerpo del otro, quedando sobre él, siguiendo con el beso y moviéndose lentamente sobre él, una mano se dedicó a acariciar su cuerpo, bajando por sus costados y luego hasta los pantalones del vampiro, comenzó a bajarlos lentamente y luego volviendo a subir su manos. Se separó de sus labios y abrió los ojos, mirandole a los ojos por unos segundos.- Yo debí haber tenido un pcoo más de valor, y sólo decirte lo que sentía -dijo algo agitado, pasó sus dedos por los cabellos de Gokudera y volvió a besarle, retomando su acción.

Al quedar su nuca contra la almohada, apretó sus ojos un poco al sentir como el otro recorría su cuerpo mientras los movimientos de ambos seguían; balanceando un poco sus caderas de vez en vez provocando un roce mas cercano mientras le seguía el beso jugueteando de la misma forma con la lengua contraria separando sus labios por falta de aire escuchando lo que este decia mientras su pecho subia y bajaba un poco mas rápido de lo normal idiota susurro bastante bajo cuando el otro volvió a besarle
Paso sus brazos alrededor del cuello de este volviendo a mover su cuerpo de la misma forma terminando el beso mordiendo el labio inferior de este jalándolo un poco. La luz estaba a medias aun asi con el ventanal completamente expuesto hacia la calle *yo fui el cobarde* pensó eso era verdad era mas que obvio pero el temor de que el otro se le burlara o le tomara por compasión… suspiro contra los labios del contrario; no paso mucho para que se escucharan unos golpes contra la puerta de la habitación, entre abrió sus ojos mirando de reojo a la puerta la cual volvia a ser tocada, tres golpes bastantes delicados no era la forma de golpear de un hombre o acaso seria bastante amanerado? En fin bajo uno de sus brazos y lo apoyo en los tendidos de la cama mientras volvían a golpear y por fin una cierta vocesita se escuchaba de fuera [i]-uhmm.. Yamamoto-san? Se encuentra ahí?[i] ni siquiera parpadeo al escuchar aquella voz para voltearle a mirar enarcando una ceja -Yamamoto-san?.. quien mierdas te espera afuera eh idiota? le dijo con un tono un tanto molesto quitando su otro brazo de este muévete le dijo empujándole un poco para que se fuera de una condenada vez a ver quien lo necesitaba

Estaba concentrado en el otro, no quiso hacerle caso al golpe de las puertas, pues de echo de primero pensó que no era en su habitación, pero después de escuchar su nombre se tuvo que separar, miró curioso a Gokudera y abrió los ojos.- Yo no espero a nadie, y no sé quien pueda buscarme... -se sentó en la cama y tomó los pantalones que había dejado hace un rato, caminó hacia la puerta y la abrió alzando una ceja, una mujer que no conocía estaba allí.- Disculpe? -preguntó mientras la mujer miraba el marcado abdomen del moreno y luego le miraba a los ojos nerviosa.- Mmm... quería preguntarle si... -pestañeó un par de veces tratando de mirar hacia adentro para fijarse si alguien estaba allí, pues no había visto al peligris entrar a la habitación. Pasó un dedo al abdomen del otro y Yamamoto tomó su mano y la dejó a un lado.- Si está solo... -preguntó cerca de él mirándole a los ojos, entonces Takeshi se alejó y suspiró.- No, no estoy solo, si me disculpa... - comenzó a decirle para cerrar la puerta- No no... en serio yo podría ayudarle a no sé... -siguió la mujer.- Le dije que no estoy solo... -le dijo algo más golpeado y cerró la puerta, apoyó su espalda en ella y llevó una mano a su nuca cerrando los ojos y echando la cabeza hacia atrás, entonces volvió al lado de Gokudera, se sacó los pantalones y volvió a dejarles en donde los tenía.- No sé que fue eso... -le dijo mirándole a los ojos con seriedad, quizás ahora Hayato creería otra cosa y eso no sería divertido para nada.

Que no le veía problema hace muy poco había comenzado algo que ni siquiera tenía planeado y ahora se paraba de la cama. Le miró con curiosidad por unos segundos, se puso de pie, se acercó y respiró algo más rápido y mucho más cuando estuvo más cerca de el otro mirándole a los ojos, elevó sus mano para tomarlo pero entonces dio la vuelta y abrió la puerta para salir y de ahí. Se llevó la mano a la mandíbula y miró por unos segundos la puerta, se puso rápidamente los pantalones y salió corriendo de la habitación, poco después le alcanzó y le tomo por un brazo, no le importaba mucho andar sin camisa fuera de la habitación miró a los ojos a Gokudera.- Como puedes decir ese tipo de cosas... -comenzó a decirle, no entendía por que se comportaba así.- Y no la conocía... -cerró los ojos suspirando y no lo dejó ir por nada del mundo, cuantas veces tenía que hacer eso para que de una vez se convenciera de que el era la persona a quien quería.- No sé como supo mi nombre y no sé por que esa mujer insistía tanto, soy capaz de ir contigo a decirle que yo te amo a ti y si quieres se lo digo a todos -siguió hablándole y comenzó a jalarlo hasta que lo llevó de nuevo a la habitación, cerró la puerta y volvió a tomarlo, ahora de la mejillas.- Yo te amo a ti... cuantas veces te lo voy a tener que repetir... -le besó cerrando un poco los ojos para volver a mirarle.- No me dejes por que yo no lo voy a hacer -le dijo y besó su mejilla. Respiró hondo y lo abrazó con fuerza, pero entonces abrió los ojos "quizás, el quiere irse ahora... y esta fue una escusa" soltó el abrazó y lo miró a los ojos.- Pero... si tu en verdad no vas a estar bien conmigo... si tu quieres irte, puedes hacerlo, yo no te lo voy a impedir... no sé que es lo que quieres, lo que quieras estará bien -poco a poco comenzaba a bajar los brazos, siguió mirándole a los ojos con necesidad, no quería que se fuera, esperaba que al menos supiera ver sus ojos y ver que en verdad le amaba.

Se quedó callado al escuchar todo ese tipo de cosas, en verdad le dolían pero tenía razón, respiró profundamente ya mucho más calmado y comenzó a vestirse, tomando la camisa y abrochandola, aun le escuchaba, entonces no sé inmutó cuando le dijo aquello y tomó sus cosas.- Ya no hay más cuartos -dijo cuando ya comenzaba a irse.- No hace falta que te muevas... -se acomodó bien las cosas.- Si es muy rápido... bien, pero eso es para personas normales, se que vamos a tener demasiados años a nuestra disposición, pero después de todos los años que han pasado desde que nos conocimos -miró al otro como con algo de ironía, si iba a comportarse de esa forma entonces ya no pensaba rebajarse más, lo había echo demasiado, hace unos minutos estaban bien y ya luego todo se arruino ante la visita de aquella mujer que ni siquiera conocía, ahora creía muy en serio que las cosas entre los dos nunca iban a funcionar de verdad, no si Gokudera no creía en el y de pronto se comportaba así, si estaba jugando a eso entonces haría lo mismo, de pronto comenzaba a ver todo de manera negativa y con algo de resentimiento, se adelantó para llegar a la puerta y abrirla.- Quédate tu aquí, después de todo soy yo el que debo irme -sin más le miró por ultima vez antes de salir y cerró la puerta tras él, con el ceño fruncido, al parecer la personalidad nueva de Yamamoto volvería, y pensar que con Hayato todo sería como antes, eso si era una estupidez.